Uno siempre ha tenido la creencia de que los grandes equipos, tras rotundos fracasos y enésimas frustraciones, se ven obligados a reconstruir sus plantillas para volver a ser aspirantes a la gloria. Equipos con estos síntomas y que han buscado este tipo de remedio hay para dar y tomar, aunque sólo citaré dos casos: el del Madrid casi cada año desde la era Del Bosque y el del Bayern 2007-2008. El paradigma que nos ocupa en este texto es el de la Vecchia Signora, que tras quedar en la séptima posición de la Serie A, involucra a más de veinte futbolistas entre idas y venidas.
Las llegadas: de Storari a Quagliarella
La lesión sufrida por Buffon en la pasada cita sudafricana, unida a la retirada de Chimenti y a la poca fiabilidad mostrada por Manninger obligó a la Juve a contratar al ex levantinista Storari. No es un portero extremadamente fiable ni de highlights, pero puede cumplir de sobra hasta que vuelva el titularísimo.
Las otras tres adquisiciones en propiedad –Bonucci, Krasic y Jorge Martínez- no parece que vayan a tener el mismo rol dentro del equipo de Del Neri: Bonucci va a formar junto a Chiellini una de las mejores parejas de centrales del Calcio, además de tener una excelente media de edad en la línea defensiva; Krasic, para muchos el nuevo Nedved –me incluyo en esta corriente de opinión-, es indiscutible en uno de los dos costados. No recuerda al checo únicamente en su apariencia; su forma de desplazarse y su actitud en el campo parecen calcadas a las del Balón de Oro 2003. Respecto a Martínez, la idea del técnico hasta ahora ha sido la de que parta como suplente de Krasic o Pepe.
Las otras seis incorporaciones al equipo Juventino, todas ellas en calidad de cedido y casi el total con opción de compra, tendrán una importancia relativa y variada en esta renovada squadra: en defensa parece que sólo Motta será titular, con Traoré –en principio- por detrás de De Ceglie y Rinaudo en el papel de cuarto central. No parece que el ex red Aquilani vaya a tener un puesto asegurado en la medular –formada indiscutiblemente por Marchisio y uno del binomio Melo-Sissoko-; remarcar que el turinés Lanzafame vuelve a la Juve, veremos en qué papel y si jugando como centrocampista lateral o segundo punta. En cuanto a Quagliarella, se repartirá los minutos con Amauri y Iaquinta, suponiendo –como hasta ahora- que Del Piero seguirá jugando de inicio.
Las salidas: se cercena el equipo campeón
La venta de Camoranesi y la partida de jugadores como Zébina, Trézéguet o Cannavaro, unidas a las de años anteriores -Zambrotta, Vieira o Ibrahimovic-, dejan a la Juve con sólo dos representantes de aquel 11 inicial de la mejor Vecchia Signora de la decáda: aquel equipo entrenado por Fabio Capello, campeón de la Serie A en 2005 y 2006 con un domino absoluto –a pesar de que le despojaron de estos títulos en los despachos-.
Del total de jugadores cuyo vínculo con la Juve ha finalizado, únicamente tres –además de Camoranesi- han servido para engordar la tesorería turinesa: Diego, Poulsen y Molinaro. Sólo se le dio un año al ex Oporto y Werder Bremen, marcha condicionada -¿y precipitada?- por la depresión económica. Poulsen ha acabado marchándose sin pena ni gloria. Molinaro, despreciado y vilipendiado en Italia, no parece que vaya a ofrecer un rendimiento inferior al de De Ceglie o Traoré.
Las otras cuatro salidas -Cáceres y Candreva tras cesión- y el préstamo de Tiago y Giovinco no harán que cambie en demasía la estructura de este equipo. Parece bastante positivo que el joven talento italiano vaya a disfrutar de minutos en el Parma.
Muy buen artículo! Resume perfectamente lo que ha supuesto este verano para los juventinos, un 'calciomercato' frenético...
ResponderEliminarCoincido contigo en que a este equipo le ha faltado la guinda (probablemente Dzeko), aunque quizá con la inauguración del nuevo estadio el próximo julio tengamos suerte. Con esto no quiero decir que tengamos mal equipo, es más, creo que con un poco de tiempo y trabajo se pueden hacer cosas bonitas...
En el apartado salidas jamás entendí la marcha de Molinaro, para mí superior tanto a De Ceglie como a Grosso (y está por ver si a Traoré también), así como la venta de Diego, merecedor de una segunda oportunidad...
En fin, esperemos no arrepentirnos a final de temporada y, si se puede, celebrar algo bueno.
Un abrazo!
mucho lirili y poco lerele.la Juve ha vuelto a empezar regulera y se atisba otro año en el que luchará por entrar en Champions ante los de siempre (Roma-Samp-Fiore) y otros equipos que han dado un pase adelante como SS Lazio.Los equipos milaneses estan en otra galaxia.
ResponderEliminarSigo sin entender pq no está Giovinco en este equipo.Con Klasnic,pues promete pero piano piano.
La delantera de este equipo debe ser Quagliarella-Amauri.que triste comparandola con la de su ultima copa de europa:Vialli-Ravanelli con del piero empezando...previa llegada a Vieri o Ibra.
Hola hola.
ResponderEliminarAhí está la clave: la Juve necesita jerarquizar la delantera -como el Milan con Borriello, Huntelaar e Inzaghi; 2 de ellos fuera y finalmente el titular indiscutible es Ibra-, ya que ninguno de los 4 delanteros es diferencialmente superior al resto.
Pantoja, eso de que están en otra galaxia... El Milan veremos cómo rinde ante rivales grandes; su defensa -los laterales sobre todo- no es para tirar cohetes. Y en el Inter-Juve del otro día los bianconeros tuvieron el partido en su mano. No creo que la Juve se vaya a quedar tan lejos de ellos.
La Roma el año pasao fue segunda y para mí se han reforzao bien. Al loro. El Lazio caerá más pronto que tarde.
Por otra parte, Benayoun se pierde todo el año. Vaya palo para una plantilla tan corta como la del Chelsea.
Saludos